Conozco un caso en el que cuando ya llevaban 3 semanas saliendo ella se mosqueó porque siempre le decía «carinyu». Entonces le tuvo que confesar que no recordaba su nombre.
Después de ese día se acordó y llevan más de 20 años felizmente casados.
Y bueno, es un hecho real y documentado que mi madre no supo el nombre verdadero de mi padre hasta el día que firmaron los papeles del casorio en el registro civil…
Puto Xkcd, el mismo chiste pero más gracioso y más fácil de dibujar!
Me ha dado un poco de envidia verlo, pero me he reído igualmente, gracias por compartirlo!
Siempre te queda el recurso siguiente:
– Es que acuerdo de tu nombre…
+ ¡Cómo!… Manuela (o Azucena, o ….)
– No, mujer, eso sí me acuerdo, me refería al apellido…
A nadie le extraña que no te acuerdes del apellido…
Curioso porque en el libro de Dale Carnegie «como ganar amigos e influir sobre las personas», uno de los libros de autoyuda más famosos del mundo, la primera lección es aprender siempre el nombre propio. Carnegie sostiene que si eres capaz de recordar siempre los nombres y soltarlos de vez en cuando (para que el otro vea que te acuerdas) podrás comerte el mundo a bocados. ¿Que opinas, eh…Listo?
Bueno, me viene a la cabeza una escena del Sr Burns entrando en el ascensor:
– Hola Lenny, Carl, Guillermo. Hola… em… – mirando a Homer sin saber su nombre.
(Se van del ascensor)
– No te lo tomes a mal, Homer, siempre se hace un lío con los nombres.
– Sí, en el picnic pensó que mi hijo Renaldo se llamaba Ronaldo, ¿no es increible?
Conozco un caso en el que cuando ya llevaban 3 semanas saliendo ella se mosqueó porque siempre le decía «carinyu». Entonces le tuvo que confesar que no recordaba su nombre.
Después de ese día se acordó y llevan más de 20 años felizmente casados.
Y bueno, es un hecho real y documentado que mi madre no supo el nombre verdadero de mi padre hasta el día que firmaron los papeles del casorio en el registro civil…
Y siempre queda la arriesgada situación de aprovechar que va al baño para abrir el bolso, sacar la cartera y mirar su dni
Randall lo llevó al extremo
http://xkcd.com/302/
Puto Xkcd, el mismo chiste pero más gracioso y más fácil de dibujar!
Me ha dado un poco de envidia verlo, pero me he reído igualmente, gracias por compartirlo!
Siempre te queda el recurso siguiente:
– Es que acuerdo de tu nombre…
+ ¡Cómo!… Manuela (o Azucena, o ….)
– No, mujer, eso sí me acuerdo, me refería al apellido…
A nadie le extraña que no te acuerdes del apellido…
S2
Ranganok Schahzaman
Real como la vida misma.
Curioso porque en el libro de Dale Carnegie «como ganar amigos e influir sobre las personas», uno de los libros de autoyuda más famosos del mundo, la primera lección es aprender siempre el nombre propio. Carnegie sostiene que si eres capaz de recordar siempre los nombres y soltarlos de vez en cuando (para que el otro vea que te acuerdas) podrás comerte el mundo a bocados. ¿Que opinas, eh…Listo?
Soy muy fan de ese Comosellame Carnegie, si el dice que es bueno aprenderse nombres yo me comprometo a hacer un esfuerzo!
Pues una tía abuela supo el verdadero nombre de su esposo después que él falleció…
Esto lo hizo Seinfield hace muuuuuchos años, bastante antes que xkcd.
http://www.youtube.com/watch?v=2Vq5-dRYp-c
¡¡¡Puto Seinfield!!! ¿Nadie más? ¿Nadie más ha hecho este chiste antes que yo? ¿Los Simpson?
Bueno, me viene a la cabeza una escena del Sr Burns entrando en el ascensor:
– Hola Lenny, Carl, Guillermo. Hola… em… – mirando a Homer sin saber su nombre.
(Se van del ascensor)
– No te lo tomes a mal, Homer, siempre se hace un lío con los nombres.
– Sí, en el picnic pensó que mi hijo Renaldo se llamaba Ronaldo, ¿no es increible?
No fue para esto para lo que inventaron el Facebook?